jueves, 11 de febrero de 2010

Lo Justo y Necesario. Parte 2. Peregrinacion, palabra bonita para "Desplazados".



(Algo de música para ambientar, querido lector)




Mi padre fué militar, para mi fortuna, así que lo primero que hice que hacerme del Galil 556 que guardaba en su closet, además de sacar un revolver calibre 38, una confiable 9 mm, y cargarme de municiones hasta donde pude. No sabía que ocurría, pero no permitiría que me tomara por sorpresa.

Steff y yo nos convertimos de inmediato en un excelente equipo, ocupándonos de las prioridades de inmediato, aún sin saber qué ocurría.

Tomar todos los recipientes con los que contábamos y llenarlos con agua, organizar la comida por su condición de perecedera, empacar un morral cada uno con lo más importante, bloquear puertas y ventanas, organizar una ruta de escape; y por último, encender la televisión para "Informarnos" un poco mejor.

La prensa se encontraba en el paraiso: Caos, muertos, hospitales atiborrados, la fuerza pública volcada a las calles, y por alguna razón, una creciente ola de hombres sin razon sembrando el miedo en las calles.

No sabría definir si fue informativo o asqueroso ver como los camarógrafos y las presentadoras filmaban desde pisos altos como hombres y mujeres, ya muchos cubiertos de heridas, con la ropa desgarrada y expresiones ambiguas, asolaban restaurantes, se atiborraban de comida hasta que sus vientres reventaban, golpeaban al desdichado que tuvieran en su camino o violaban indistintamente todo lo que se moviera y gritara.

Tiros por doquier, civiles y uniformados armados disparando a los trogloditas, quienes recibían los tiros con horrendos gritos... Todavía no se definir si eran de dolor o de ira, pero acto seguido cargaban como bestias, y mataban a golpes a quien pudieran si antes no los destruían a balazos.

Las líneas estaban complpetamente congestionadas, el internet a duras penas funcionaba... al menos fue así hasta unos dos días después , cuando, por fin, mi messenger inició sesión y pude acceder a mi correo electrónico, un rato después pude llamar sin problemas.

¿La causa? supongo que la cantidad de muertos tuvo algo que ver.

Llamamos a cuantos amigos y conocidos teníamos, pero más de la mitad no respondían, solo unos pocos aparecían conectados en messenger, y sus mensajes claramente expresaban lo crítico de la situación. Así que pensé que mi mejor opción sería alguien que todavía conservara su nombre, y por ende, su calma.

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SmartMouth says:
Mujer...
• Mala Clara • says:
dónde estás?
SmartMouth says:
En mi casa, con Steffan
vos?
• Mala Clara • says:
Cómo conseguiste la conexión?
SmartMouth says:
No se parce, lo dejé intentando reconectarse desde hace dos días, hace cinco minutos entró
Has visto lo que está pasando?
• Mala Clara • says:
yo estoy en la casa de alguien, aún me faltan unas conexiones, si se cae, esperame, ke estaré terminando de conectar los cables
SmartMouth says:
Parce... hay una gente loquísima
violando, matando, comiéndose lo que se encuentran
• Mala Clara • says:
ya lo vi todo.... Todo pana.
Escuchame. hay un grupo de gente
te acordás del parkeadero al frente de la Universidad?
SmartMouth says:
claro
• Mala Clara • says:
alguien ke conozco consiguió conexión desde allá
dice ke está con más personas
armando una trinchera
• Mala Clara • says:
La idea es ke sea una fortaleza
mientras se toman la U
SmartMouth says:
Tomarse la U=
?
Como tomarse la U?
Para qué?
• Mala Clara • says:
Tomarsela... como una revolución...
tenemos ke buscar refugio seguro... no keda mucho tiempo
antes ke lleguen a nosotros.
..
SmartMouth says:
parce... yo tengo una camioneta, un fusil, una pistola y un revolver
son de confiar?
• Mala Clara • says:
en estos tiempo, todo lo ke no esté herido es de confiar,.....
SmartMouth says:
...
ok
• Mala Clara • says:
Tenés ke llegar a la tienda ke se encuentra al lado del parkeadero
abrís la segunda puerta a la derecha
allá estarán todos, tenemos ke planear la toma
SmartMouth says:
Ok
Yo llego
Y parce... Que alegría que estés bien
• Mala Clara • says:
Eso espero!
Tratá de mantenerte con vida
SmartMouth says:
me conoces
• Mala Clara • says:
no sé...
SmartMouth says:
nos vemos pronto, o nunca
• Mala Clara • says:
Hazlo!
voy a buscar algo de comer
nos vemos en el parkeadero!
SmartMouth says:
Bien, suerte.
• Mala Clara • says:
vivos!


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- ¡Pelao! - Grité a Steffan, que supuse que estaba vigilando el televisor en ese momento, no le tomó mucho para aparecerse.
- Encontré sobrevivientes, te acordás de Maria Clara?
- Si... esa mujer no me da buena espina, da la impresión de ser muy ruda
- ¿Y de qué nos va a servir una florecita virgen ahora?

Hizo silencio, con la mirada buscaba algo en qué apoyarse, algún argumento. Él bien sabía lo radical del obrar de Maria, mientras él era más precavido. Se limitó a escuchar mientras buscaba un buen contraargumento.

- Bueno, la nena me dijo que están armando un grupo para tomarse la U y volverla refugio, y la verdad me parece la mejor opción - Hice una pausa, esperando a qué dijera algo, pero lo interrumpí antes de que abriera la boca. - Si, parce, yo se que es arriesgado, y que esa mujer siempre te ha parecido... ¿Primitiva? (Rió recordando un viejo chiste). Pero las cosas no parecen apuntar a una mejoría, se nos van a acabar las proviciones... Y... No es por ofender, pero no quiero pasar el resto de mi vida con otro tipo; así seas vos.

No tomó más de cinco minutos para que subiéramos todo a la camioneta de mi papá, nos preparáramos mentalmente y partiéramos. Dejando atrás solamente el computador prendido con la sesión iniciada en messenger, con el automensaje - Huímos hacia la Universidad de Antioquia, Si necesita refugio, venga con nosotros agitando una prenda blanca --



* * *



Al otro lado de la ciudad, un hombre fumaba un cigarrillo apostado en su balcón, en el séptimo piso de un pequeño edificio residencial, el humo salía a bocanadas por entre sus labios, se abría en canales por su prominente nariz, y se elevaba más arriba de su cabeza.

Tambien resguardado en su pequeño apartamento, dandole las últimas aspiradas a su rubio, tuvo de nuevo la misma conversación que había tenido consigo mismo cada que encendía uno y pensaba, fué lo mismo desde que se asomó al oir los gritos y vió a su madre caer presa.

" Todos a quienes amaba están perdidos, y si han sobrevivido, eventualmente los volveré a ver…así que no hay por qué preocuparse si hay tanto de que ocuparse ahora.

Primero, lo primero: apertrecharme y atrincherarme... Momento, eso ya está hecho, y no parece ir a ninguna parte, no tengo vehículo, ni provisiones... el EXITO está cerca, pero debe estar plagado de esos bichos.

Ahora bien, si se supone que sobreviva…¡Duh! Claro que voy a sobrevivir: soy un puto genio y no puedo morirme tan güevonamente! El caso es que necesito aprender muchísimas cosas si voy a vivir solo o con un montón de brutos, no quieran los dioses, teniendo que hacerme cargo de ellos: ya tengo la excusa para tratar de aprender todo lo que se sabe en el mundo.

Mejor me levanto de una vez, no sea que alguien tome primero lo que es mío por derecho, de algo ha de servir haber pateado tanto trasero todo este tiempo ¿Eh?."

Ni una lágrima para los muertos

Pasó por su cuarto, tomando el morral estilo militar que tenía ya empacado desde el primer momento en que entendió que el Ragnarök había llegado, vistió un jean cómodo, sus botas platineras que no le cubrían los tobillos (para conservar la flexibilidad), su camiseta favorita que decía “You can’t have manslaughter without laughter” y su chaqueta de cuero.

Apoyado contra la pared, un tubo de acero inoxidable con el que antes practicaba movimientos de lanza, y que ahora tenía las dos puntas afiladas. Lo agarró luego de tomar los puñales decorativos que tenía en el cuarto y acomodarlos en un cinturón, guardarse unos cuantos explosivos de su manufactura en su chaqueta de cuero; y finalmente poniendo en el frente de su cinto la 9mm que su papá consiguió de manera no muy legal.

Sin más ni más se despidió de su fiel Laptop después de hacer el último intento para enviar unos correos, retiró la barricada que guardaba la puerta de su casa y salió a la calle. Si la muerte iba a encontrarlo, que lo encontrara armado y listo.

"-Necesito encontrar gente y refugio. Por lo tanto, necesito tener con qué negociar. Y lo más importante, ¡NECESITO CIGARRILLOS!"

Su unidad residencial se encontraba desierta, todos los autos en el parqueadero estaban cerrados, así que forzó el tanque de un par, se confeccionó un par de Molotovs usando la ropa de un occiso cercano, y salió. No se molestó en revisar al celador, no pagaban suficiente de administración ni para que cargara un pinche revolver.

Unas pocas cuadras después, como caída del cielo, encontró tirada en medio de la calle una Blazer de puertas abiertas. Vaya suerte, las llaves puestecitas en el arranque, y un farandulerito ensangrentado a medio morir en el asiento trasero.

Era una carga, él no era médico, y a decir verdad le importaba un bodrio lo que le pasara a cualquier otro. Desapego total, sabía que debía importarle poco o nada quien fuera si quería seguir vivo. Así que suavemente lo empujó con el pié y lo dejó caer sobre el asfalto. ¿Tiro de gracia? Las balas son un bien MUY inelástico en estos tiempos.

Se abrió paso hasta el EXITO de Laureles sin muchos incidentes. Retiró las llaves y entró al almacén, barra en mano, preparado para tomar su pistola, pero no se oía ruido alguno. Así que tranquilamente se pasó por las comidas enlatadas, tomando las pocas que quedaban en los estantes y regadas por el suelo, y echándolas en un carrito en el que había acomodado su lanza, pasó luego por una dotación descomunal de cigarrillos; y luego, agua y unas dos o tres cosillas que le serían útiles. Tomó unas cuantas ollas, las herramientas que no había encontrado en su casa, granos, alimentos instantáneos, baterias de todo tipo, condones como para rellenar una piñata, medicamentos, artículos de aseo, y por último se detuvo en el estante que el saqueo pareció haber olvidado. Bendita fuera Antioquia por la panela, porque si levantaba campesinos a las cuatro de la mañana en el monte, levantaría supervivientes en estos tiempos. Aunque, a decir verdad, habían más proviciones de las que esperaba encontrar, lo que dejaba dos opciones

O muchos, como él, se habían escondido los primeros días, o la masacre había sido tan violenta que pocos lograron llegar a tomar proviciones. Y dada la cantidad de muertos en las calles, abogaba por la segunda.

Súbitamente, de entre un montón de cajas apiladas salió corriendo una joven despavorida, soltando un gritito entrecortado cada tres pasos que daba con torpeza, él la miró con una mueca burlona al creer que era de él que huía, pero pronto vió a una prominente bola de manteca ensangrentada y medio desnuda persiguiéndola a todo lo que daban sus regordetas piernas. Sin pensarlo arrojó su lanza, y el gordo fue a dar contra una pared, clavado a ella.

Desenfundar puñal, clavarlo fuerte en el cuello sobre la tráquea, limpiar la sangre... limpiar, limpiar... - ¡Mierda! ¡Este gordo si que sangra! - Dejó salir inconcientemente esquivando un chorro de sangre. tomó el delantal de otro de los caídos y limpió bien su hoja antes de guardarla, para luego encontrarse, a metros, con unos ojitos cafes que brillaban sonriéndole.


"Carajo... Me volví un héroe"


Tenía el maquillaje corrido de tanto llorar, los mechones de pelo teñido de rubio le caían sobre la cara, y su ropa descubierta, minúscula, en vez de excitarlo le generaba algo de repulsión. Pero por otra parte, de algo podría servir, al fin y al cabo no sabía si había otra mujer en el resto del mundo.

Así que con una seña simple le indicó que lo siguiera, desencajó el tubo del obeso cadaver, montó sus provisiones al auto, recogió un escopeta que le encontró en las manos a un celador y un cinturón que tenía unos pocos cartuchos, y le indicó que se sentara en el asiento del copiloto. No había cerrado la puerta cuando le dijo escuetamente: - Mientras no me estorbés, podés seguirme..si te ganás un palazo o un pepazo es culpa tuya.

Ella calló largamente antes de decirle lo que le pareció que sería importante.

- Hay gente yendo hacia la Universidad de Antioquia, quieren tomarla como refugio, yo iba para ayá.

"No se diga más", Pensó, dió un cuarto de vuelta y arrancó hacia la universidad, siguiendo sus indicaciones.

-Ojalá la biblioteca esté intacta...- Murmuró él.

10 comentarios:

  1. Kien sera ese personaje tan genial? :D
    Esta muy sabroso, pelao...keep on with the good stuff!

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  2. *Smile* *Smile* *Smile*
    Esto apenas esta comenzando... ; )...Me alegra ver que el proyecto mejora con cada entrega...

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  3. Está muy bacana la historia, ¿ké otras sorpresas traerá?

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  4. Simplemente me ENCANTA!
    mil veces mejor q la primera parte

    Estoy a la espera de lo q sigue...
    Felicitaciones!

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  5. que siga, que siga, que siga!!!!!! pero yaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa, como cleptomana avida de sexo, como sucubo avida de carne, asi me dejaste avida de la continuacion, por que se me ocurren esas comparaciones? creo que tu lo entenderas mejor que yo misma
    Ojo con las palabras que te tragas

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  6. corrijo, no era cleptomana, era ninfomana, pequeño lapsus mental, lo siento

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  7. Que buena historia... logra como pocas mantener al lector en vilo.
    Esperare con ansias la siguiente entrega.

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  8. ...Que genio: Ojalá la biblioteca esté intacta!!! ...Este si sabe preocuparse por lo verdaderamente importante en tiempos de crisis. ja ja ja. Muy buen remate, felicitaciones!

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  9. Me gusta, me gusta la naturalidad, la espontaneidad que desprende. Hay partes que no me parecen del todo correctamente expresadas, y creo que deberías cuidar más la ortografía, pero bien, está entretenido y tiene partes muy buenas.

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